Entrevistas por correo electrónico

Roberto Jimenez Jimenez/ febrero 10, 2020

entrevista-de-trabajo

Uno de los nuevos formatos de hacer entrevistas de trabajo es mediante el correo electrónico.

Aunque puede parecer una herramienta un poco impersonal para formar parte de un proceso de selección, cuenta con algunas ventajas de las que debemos aprovecharnos. Sin embargo, también tiene inconvenientes que debemos intentar mejorar o procurar que no se conviertan en un hándicap para el resultado final que buscamos: conseguir el puesto de trabajo.

Ventajas

  • Ofrecen tiempo. Muchas veces las entrevistas de trabajo cara-cara o mediante vía telefónica o Skype salen mal porque el candidato se pone nervioso o no sabe cómo responder ante alguna pregunta. Por eso, el principal beneficio de responder a una entrevista mediante correo electrónico es que podemos pensar detenidamente nuestra respuesta. Hacer un resumen óptimo sobre nuestras principales cualidades a la hora de responder en el e-mail.
  • Respuestas precisas. En ocasiones, cometemos el error de sobre argumentar en una entrevista o dar información en exceso que no interesa al entrevistador. Por el contrario, a veces no damos suficientes datos sobre algo que a la empresa puede interesar y que nosotros no sabemos qué decir. El correo electrónico nos permite repasar una y otra vez nuestras respuestas para ofrecer la contestación más adecuada y documentada posible.

Inconvenientes

  • Impersonal. El solicitante de empleo no puede demostrar sus dotes comunicativas en persona ni plasmar su personalidad mediante un correo electrónico. Aunque muchos candidatos pueden pensar que esto es una ventaja ya que así evitan situaciones embarazosas, en realidad es una desventaja ya que no nos deja mostrarnos ‘tal y como somos’.
  • Preguntas confusas. Puede darse el caso de que una de las preguntas que hay que contestar en la entrevista por e-mail no sepamos a qué se refiere. Ya sea porque no quedan bien explicadas y no sabemos si contestar una cosa u otra o bien porque contestemos algo que realmente no nos estaban pidiendo. En una entrevista en la que la comunicación es directa se podría preguntar al entrevistador, en este caso, se pueden cometer errores o alargar el proceso de selección al tener que enviar un correo electrónico para aclarar la confusión.

Artículo elaborado por Alicia Vázquez. Redactora freelance especializada en empleo.

Compartir esta entrada